Los niños y jóvenes experimentan preocupación y estrés debido a las visitas al médico y los procedimientos. Puede que tengan que entrar en entornos nuevos y extraños, conocer gente nueva y enfrentarse a nuevas rutinas. Puede que tengan que ser examinados, proporcionar muestras para pruebas, someterse a tratamiento y, tal vez, operarse con anestesia. Esos eventos y experiencias suelen dejar su huella en situaciones favorables, o incluso con más motivo, si surgen problemas o dificultades o si el tratamiento es complicado. Esto puede ocasionar efectos a corto y largo plazo en los niños, los jóvenes y las familias, por lo que se hace todo lo posible para reducir estas consecuencias.
La preparación adecuada reduce el estrés y la preocupación por cuestiones médicas en los niños y jóvenes. Esto facilita los procedimientos y reduce los efectos negativos a corto y largo plazo. Ayuda a afrontar lo que ha sucedido, y a sobrellevar mejor cualquier cuidado y tratamiento médico futuro. Para que los niños y jóvenes puedan asimilar y comprender lo que oyen, leen, ven y experimentan, también es importante que dispongan de varias oportunidades para prepararse de diferentes maneras.
Como padre o tutor legal, usted es quien mejor conoce al niño. Usted es el vínculo más importante entre su hijo y los profesionales que trabajamos en el hospital. Usted es un apoyo muy útil para su hijo. Es importante que se sienta bien informado y seguro sobre la situación. Por ello, vamos a ayudarle a prepararse y a entender mejor el proceso.
Indíquenos también si usted o su hijo están muy preocupados por lo que va a pasar, o si tienen alguna otra inquietud. Estamos aquí para responder a sus preguntas y ayudarles.